Voces Contra el Terrorismo denuncia que los beneficios concedidos a los etarras Aparicio y Urretavizcaya son parte de la estrategia de acercamientos encubiertos de los terroristas. Nos parece inmoral que el mismo día que el Parlamento rindió homenaje a las victimas de ETA, uno de los etarras estuviera viajando camino de Basauri.

Madrid, 5 de julio de 2012. Desde Voces contra el Terrorismo queremos poner de manifiesto la vergüenza que nos producen las últimas informaciones que revelan que, el pasado jueves, el terrorista Jon Koldo Aparicio Benito, que se encontraba cumpliendo condena en el Puerto de Santa María, fue trasladado a la prisión de Basauri para realizar unas pruebas de fertilidad. Un beneficio que no se concede a cualquier preso común. Asimismo, nos parece una indecencia que se haya permitido el traslado desde Córdoba del etarra Ion Urretavizcaya Sahuquillo a esa misma prisión para conocer a su hija, nacida el pasado 3 de junio. Somos conscientes de que la ley contempla un permiso de 72 horas para cualquier preso que haya sido padre, pero estaremos vigilantes para que dicho plazo se cumpla a raja tabla.

Creemos firmemente que estos beneficios son parte de la estrategia de acercamientos encubiertos que está llevando a cabo el Ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz. El modus operandi pasa por esgrimir problemas de salud y la necesidad de informes médicos o psicológicos para poder trasladar a los etarras a cárceles del País Vasco, y, una vez allí, dado que las competencias sanitarias corresponden al Gobierno de Patxi López, alargar su estancia o incluso permitir su puesta en libertad, como ya hemos visto con el terrorista Gogortza.

Que todo esto se haya autorizado la misma semana que se cumple el 25 aniversario del atentado de Hipercor y que uno de esos traslados se estuviera produciendo al tiempo que se homenajeaba a las víctimas en el Congreso de los Diputados, nos parece una utilización inmoral de las victimas y de sus familiares por parte del Gobierno.

Todo lo que esta sucediendo no hace más que confirmar la deriva que, en materia antiterrorista, está tomando el gobierno de Mariano Rajoy, que, lejos de cumplir su programa electoral, está consumando los pactos entre el antiguo Ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba y la banda terrorista ETA.