La Fiscalía General del Estado avala en un informe las denuncias de Voces Contra el Terrorismo que viene formulando desde 2006 sobre una posible escisión de ETA para retomar la actividad armada.

REDACCIÓN VCT.- La Fiscalía ha advertido en su Memoria la posibilidad de una escisión en el seno de la banda terrorista ETA que “generaría un riesgo mucho más elevado de ejecución de atentados terroristas”. Según se desprende del informe, la posición “más intransigente” la mantienen algunos militantes de ETA encarcelados en Francia, entre los que se encuentran los últimos jefes del aparato militar de la organización terrorista.

El Ministerio Público desvela que la banda se encuentra actualmente en plena remodelación organizativa que gira sobre la potenciación de su departamento político y de comunicación, y la integración de sus estructuras militantes en el departamento logístico de la banda terrorista.

La Europol ya manifestó su preocupación el pasado mes de abril sobre la radicalización de un sector de ETA que podría atentar en el futuro y reanudar sus actividades terroristas “si no consiguen sus objetivos”. En una línea parecida, el presidente de Voces Contra el Terrorismo, Francisco José Alcaraz, afirmó en una conferencia impartida en el año 2006 bajo el título “El indulto a la serpiente” que la vuelta a la actividad armada “formaría parte de la estrategia de ETA para avanzar en sus objetivos”.

Un nuevo atentado terrorista supondría, según Alcaraz, “una escenificación de una supuesta ruptura dentro de la banda que permitiría al brazo político de ETA y a sus presos condenar la actividad armada con el fin de permitir al Gobierno la permanencia de sus marcas políticas en las instituciones y los acercamientos y excarcelaciones de los presos que expresasen una condena simulada”. Sin embargo, ese escenario no sería más que una “representación teatral programada e ideada por ETA para cumplir la hoja de ruta que tiene marcada”, sentencia Alcaraz.

La organización que preside Alcaraz advierte que estará muy vigilante ante los movimientos que se produzcan “tanto en el Gobierno como en la banda terrorista” y asegura que “cualquier paso que atente contra la dignidad de las víctimas del terrorismo tendrá una respuesta contundente en las calles”, en referencia a nuevas movilizaciones.