Voces contra el Terrorismo (VCT) cree que la decisión de la Audiencia Nacional de devolver el ‘caso Faisán’ al juez Pablo Ruz para que siga investigando no es más que “una argucia legal para evitar pronunciarse” sobre el chivatazo a ETA. El Pleno de la Sala de lo Penal argumenta que no hay indicios suficientes contra los acusados. Sin embargo, para Francisco José Alcaraz, presidente de VCT, está claro que se ha cometido un delito “porque así lo verifican las pruebas”.

Madrid, 21 de septiembre de 2011.- El presidente de Voces Contra el Terrorismo, Francisco José Alcaraz, ha manifestado su sorpresa por la decisión tomada este miércoles por el Pleno de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional. El tribunal ha revocado por unanimidad el procesamiento de los imputados en el ‘caso Faisán’ al considerar que no existen indicios suficientes contra ellos.

“No sabía que se iba a recurrir a esa argucia legal para evitar pronunciarse sobre un delito que a todas luces entendemos que se ha producido, porque así lo verifican las pruebas”, asegura Francisco José Alcaraz. De hecho, el Pleno reconoce que hay evidencias de un hecho delictivo, pero no ha querido entrar en su calificación jurídica, es decir, que finalmente no ha determinado si hubo colaboración con banda armada o, como pedía el fiscal Javier Zaragoza, únicamente un delito de revelación de secretos.

Alcaraz lamenta, en este sentido, la “falta de valentía” de la Audiencia Nacional a la hora de pronunciarse sobre el chivatazo a ETA ocurrido el 4 de mayo de 2006 en el bar Faisán, en Irún (Guipúzcoa).

El Pleno de la Sala de lo Penal ha decidido, asimismo, devolver la causa al juez instructor, Pablo Ruz, para que siga investigando y lleve a cabo nuevas diligencias. Voces Contra el Terrorismo reclama al magistrado que aproveche la ocasión para recabar nuevas pruebas “para fortalecer la acusación”.

Para Alcaraz, con esta decisión se ha puesto de manifiesto que hay jueces “muy influenciados” por la situación política. Sin ir más lejos, el ponente del auto, José Ricardo de Prada, defendió hace unos meses que el chivatazo tenía “plena justificación” en el marco de “un proceso de negociación política o de un proceso de paz”.

El presidente de Voces Contra el Terrorismo denuncia, además, que el Gobierno socialista “ha presionado” para que se archivase el caso y acusa al ex ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, y a su sucesor en el cargo, Antonio Camacho (secretario de Estado de Seguridad cuando ocurrieron los hechos), de intentar diluir la causa del chivatazo a la banda terrorista.