CARLOS MANUEL PATIÑO CASANOVA fallecido  el 23 de noviembre de 1982 en Renteria, a consecuencia de las heridas por el atentado sufrido el 18 de noviembre de 1982

MOHAMED AHMED ABDERRAHMÁN asesinado el 23 de noviembre de 1984 en Irún.

ANA ISABEL AROSTEGI LEGARRETA asesinada el 23 de noviembre de 2001 en Beasain.

JAVIER MIJANGOS MARTÍNEZ DE BUJO asesinado el 23 de noviembre de 2001 en Beasain.

El 23 de noviembre de 1982 fallece CARLOS MANUEL PATIÑO CASANOVA, cinco días después de haber sido ametrallado por miembros de la banda terrorista ETA cuando, en compañía de dos compañeros de trabajo, Esteban Fariña González y Francisco Rosco Herrauzo –pintores de profesión como Carlos– circulaba por Rentería (Guipúzcoa) en un vehículo propiedad de Fariña. Los etarras, miembros del grupo Donosti, les esperaban a bordo de un Renault 12 y estaban convencidos de que los tres eran guardias civiles. Según fuentes policiales, la confusión pudo deberse a que el vehículo perteneció a un guardia civil al que, mucho tiempo antes, se lo habría comprado Esteban Fariña.

El ametrallamiento se produjo a las 12:45 horas cuando los tres trabajadores se disponían a aparcar el vehículo que ocupaban, un Seat 127. En ese momento un individuo efectuó, desde un turismo Renault 12 de color granate, varios disparos de pistola contra las ruedas del Seat 127, que quedó inmovilizado. Un terorrista que, según testigos presenciales, no aparentaba más de veinte años, descendió a continuación del Renault 12 portando una metralleta y abriendo fuego en abanico, de frente y a corta distancia, contra sus víctimas. Los otros dos ocupantes del coche dispararon también desde el mismo con otra metralleta y una pistola.

Las balas alcanzaron a varios coches aparcados en las inmediaciones y a un autobús escolar que se dirigía a recoger a los niños del barrio, sin llegar a herir al conductor ni a la profesora, que se encontraban en su interior y que tuvieron que arrojarse al suelo. Acto seguido, los pistoleros de la banda, sin dejar de disparar, huyeron precipitadamente en el mismo Renault 12 a toda velocidad en dirección a la autopista Bilbao-Behovia.

Carlos Manuel Patiño Casanova tenía 29 años. Era natural de Villamayor (La Coruña). Estaba casado y tenía dos hijos. Fue herido gravemente en la zona lumbar, el recto, glúteo derecho, muslo izquierdo, e ingresó en el hospital con un grave shock hemorrágico. Falleció a las 23:50 horas del 23 de noviembre.

A las once y media de la noche del 23 de noviembre de 1984 la banda terrorista ETA asesinaba en Irún (Guipúzcoa) con una granada al policía nacional MOHAMED AHMED ABDERRAHMÁN, y hería de gravedad a su compañero, Carlos Mata Organero, que resultó alcanzado por impactos de bala en la pierna y el abdomen.

Mohamed formaba parte de una patrulla de la Policía Nacional que se había instalado en el peaje de Irún, en la autopista Bilbao-Behovia, para dar protección a los camioneros franceses que, desde hacía algunas semanas, habían sido objeto de varios ametrallamientos por parte de la banda terrorista como respuesta a las primeras extradiciones concedidas por el Gobierno de París.

Esa noche Mohamed no tenía servicio, pero había pedido voluntariamente hacer el turno para poder llegar a tiempo a su domicilio y llevar al médico a su segunda hija, Jimo, que había nacido con parálisis cerebral. En un momento determinado Mohamed se apeó de su vehículo y se acercó al otro coche policial para fumar un cigarrillo con otros compañeros. Varios miembros de la banda, apostados en un monte cercano y armados con fusiles de asalto y un lanzagranadas, atacaron la patrulla policial. Mohamed fue alcanzado de lleno por una granada que le causó la muerte en el acto, al destrozarle completamente la espalda. Carlos Mata Organero, de 30 años y natural de Villafranca de la Torre (Badajoz) resultó herido grave.

Mohamed Ahmed Abderrahmán tenía 33 años cuando fue asesinado. Era natural de Ceuta y estaba casado con Aisha Mohamed, de 26 años. El matrimonio tenía tres hijos –Kinsa, Jimo y Nanal– y Aisha estaba embarazada del cuarto, que sería chico y nacería dos meses y medio después del asesinato del padre. Aisha le puso de nombre Mohamed, por deseo de la madre, y Bilel, el nombre que quería ponerle el policía asesinado. Mohamed empezó a trabajar siendo un niño de 12 años en una churrería de Ceuta. Después fue contratado como camarero hasta que decidió entrar en la Academia para ingresar en la Policía Nacional. Cuando tenía 26 años se casó con Aisha, que entonces tenía 18. Además de a su familia, con su sueldo ayudaba a su madre. Había pedido ser destinado al País Vasco para poder cobrar más y hacer frente a los gastos derivados de la enfermedad de su hija Jimo.

A las siete y cuarto de la tarde del viernes 23 de noviembre de 2001, ETA asesinaba a tiros a los agentes de la Ertzaintza ANA ISABEL AROSTEGI LEGARRETA y FRANCISCO JAVIER MIJANGOS MARTÍNEZ DE BUJO, cuando regulaban el tráfico en un cruce de la carretera N-I a su paso por la localidad guipuzcoana de Beasain. El cruce era un punto neurálgico de la carretera y muy conflictivo en cuanto a la circulación, especialmente los viernes por la tarde. Los dos ertzainas estaban adscritos a la unidad de Seguridad Ciudadana de la comisaría de Beasain, muy próxima al lugar del atentado, y habían relevado sólo unos minutos antes a otra pareja de la Ertzaintza para regular el tráfico, una labor que se realiza a diario en el cruce de Zaldizurrieta de la localidad guipuzcoana. Los agentes no llevaban ninguna protección, «ni tan siquiera chalecos antibalas», según fuentes de la Policía Autonómica vasca.

Dos miembros de la banda terrorista, un hombre y una mujer, se acercaron en un coche a las proximidades del cruce, bajaron del mismo y, a cara descubierta, acribillaron a balazos a bocajarro a los dos agentes de la Ertzaintza, a los que sorprendieron por la espalda. Ana Isabel Arostegi intentó defenderse del ataque, pero fue rematada por la mujer cuando yacía malherida en el suelo. Su cuerpo permaneció sobre el asfalto hasta pasadas las nueve de la noche, cuando acudió el juez de guardia que ordenó el levantamiento del cadáver. A continuación, los restos mortales de la ertzaina fueron trasladados al Instituto Anatómico Forense del cementerio de Polloe de San Sebastián, donde al día siguiente, sábado 24 de noviembre, se le practicó la autopsia. Francisco Javier Mijangos, gravemente herido, fue llevado a la Clínica de la Asunción de Tolosa, donde ingresó en estado de coma, con una bala en la cabeza. Durante 45 minutos se le practicaron maniobras de reanimación, llegando a recuperar el pulso, pero falleció poco después, hacia las 21:00 horas.

Ana Isabel Arostegi Legarreta, de 34 años, estaba casada con otro agente de la Policía Autonómica vasca, y era madre de tres hijos. Natural de Munguía (Vizcaya), pertenecía a una familia euskalduna muy arraigada en el municipio. Había formado parte de la decimotercera promoción de ertzainas y se convirtió en la primera mujer agente de ese Cuerpo víctima de la banda.

Francisco Javier Mijangos Martínez de Bujo, de 32 años, era natural de Bilbao. Estaba casado y tenía un hijo de diez meses. Igual que su compañera asesinada, pertenecía a la decimotercera promoción de la Ertzaintza y un hermano suyo era también agente de este cuerpo policial.