ANTONIO GARCÍA CABALLERO asesinado el 21 de junio de 1978 en Tolosa.

FELIPE CAPARRÓS UBIERNA, falleció el 21 de junio de 1987 , por las heridas sufridas en el atentado de Hipercor de Barcelona.

CONSUELO ORTEGA PÉREZ falleció el 21 de junio de 1987 , por las heridas sufridas en el atentado de Hipercor de Barcelona.

JAVIER BARÓ DÍAZ DE FIGEROA asesinado el 21 de junio de 1993 en Madrid

JOSÉ ALBERTO CARRETERO SOGEL asesinado el 21 de junio de 1993 en Madrid

JOSÉ MANUEL CALVO ALONSO asesinado el 21 de junio de 1993 en Madrid

FIDEL DÁVILA GARIJO asesinado el 21 de junio de 1993 en Madrid

DOMINGO OLIVO ESPARZA asesinado el 21 de junio de 1993 en Madrid

PEDRO ROBLES LÓPEZ asesinado el 21 de junio de 1993 en Madrid

JUAN ROMERO ÁLVAREZ asesinado el 21 de junio de 1993 en Madrid

A las diez de la noche del miércoles 21 de junio de 1978, la banda terrorista ETA asesinaba a tiros en Tolosa (Guipúzcoa) al policía municipal ANTONIO GARCÍA CABALLERO cuando se dirigía a su domicilio, situado en el barrio de Bidebieta de esta localidad guipuzcoana.  La víctima, desarmada y vestida de civil, se dirigía a su domicilio. Tres etarras le estaban esperando y, cuando lo vieron aparecer, lo acribillaron a balazos. Dispararon contra él más de catorce tiros, nueve de los cuales le alcanzaron causándole la muerte en el acto.

Antonio García Caballero tenía 26 años, estaba casado y era padre de dos hijos. Natural de Rueca (Badajoz), donde residía su familia, Antonio llevaba diez años ejerciendo su profesión en Tolosa.

El 21 de junio de 1987 fallecieron FELIPE CAPARRÓS UBIERNA y CONSUELO ORTEGA PÉREZ, dos días después de que la banda terrorista ETA hiciera estallar un coche-bomba en el aparcamiento del centro comercial de Hipercor en Barcelona.

 

Felipe Caparrós Ubierna tenía 44 años y estaba casado con Ángeles Alemán Sánchez. Trabajaba en la empresa de seguros C.A.P. Internacional S.A. Tenía un 60% del cuerpo quemado y falleció en el Hospital del Valle de Hebrón por una complicación respiratoria.

Consuelo Ortega Pérez, de 67 años, sufrió quemaduras graves en el 80% de su cuerpo. Ingresó en estado crítico y falleció en torno a las dos de la tarde.

A las ocho y cuarto de la mañana del 21 de junio de 1993, la banda terrorista ETA asesinaba en Madrid a seis militares y un civil que viajaban en una furgoneta oficial, haciendo detonar a su paso un potente coche-bomba, cargado con 40 kilos de amonal, en la confluencia de las calles de López de Hoyos y de Joaquín Costa.

Los muertos fueron: el teniente coronel del Ejército de Tierra JAVIER BARÓ DÍAZ DE FIGEROA; el teniente coronel del Ejército del Aire JOSÉ ALBERTO CARRETERO SOGEL; el sargento primero de la Armada JOSÉ MANUEL CALVO ALONSO; el teniente coronel del Ejército de Tierra FIDEL DÁVILA GARIJO; el capitán de fragata de la Armada DOMINGO OLIVO ESPARZA; el funcionario civil del Ministerio de Defensa PEDRO ROBLES LÓPEZ, que conducía el vehículo, y el teniente coronel del Ejército del Aire JUAN ROMERO ÁLVAREZ

 

Javier Baró Díaz de Figueroa, teniente coronel del Ejército de Tierra de 46 años, era natural de Madrid y vivía en Alcalá de Henares, en un bloque de viviendas militares en el casco antiguo de la localidad. Estaba casado y tenía un hijo y una hija. Perteneció a la 24ª promoción de cadetes de la Academia General Militar de Zaragoza. En el momento de su asesinato estaba destinado en la División de Operaciones del Estado Mayor.

José Manuel Calvo Alonso, sargento primero de la Armada, tenía 39 años. Natural de Asturias, vivía en Alcalá de Henares (Madrid). Casado y padre de tres hijos.

José Alberto Carretero Sogel, teniente coronel del Ejército del Aire, tenía 43 años. Estaba casado con Lidia y era padre de dos hijas. Tres días antes de ser asesinado por la banda terrorista ETA había recibido la Gran Cruz de San Hermenegildo por sus veinticinco años de servicio activo.

Fidel Dávila Garijo, teniente coronel del Ejército de Tierra de 46 años, estaba casado con Magdalena Casas y era padre de dos hijos.

Domingo Olivo Esparza, capitán de fragata de la Armada de 45 años, era natural de la pedanía murciana de Balsapintada, situada en el municipio de Fuente Álamo. Estaba casado y tenía cuatro hijos con edades comprendidas entre los dieciocho y los once años.

Pedro Robles López, de 57 años y funcionario civil de Defensa, era natural de Santander. Conducía el vehículo oficial en el que trasladaba a seis militares, camino de las sedes del Estado Mayor de la Defensa y el Centro Superior de Estudios de la Defensa Nacional. Estaba casado con Matilde y era padre de tres hijos.

Juan Romero Álvarez, teniente coronel del Ejército del Aire de 52 años, era natural de Cádiz. Casado y con cuatro hijos, sus grandes pasiones eran, además de la familia, la enseñanza y la equitación. En el momento de su asesinato estaba destinado en el Centro Superior de Estudios de la Defensa Nacional, donde impartía clases.