
JUAN GARCÍA LEÓN asesinado el 17 de noviembre de 1980 en Eibar.

CÉSAR UCEDA VERA fallece el 17 de Noviembre de 1982 en Madrid por las heridas sufridas por el atentado sufrido el 21 de octubre de 1982

JOSÉ MARTÍNEZ MORENO asesinado el 17 de noviembre de 1989 en Santurce.

FRANCISCO SANZ MORALES, asesinado por los GRAPO el 17 de Noviembre del 2.000 en Madrid
Pasadas las seis de la mañana del 17 de noviembre de 1980, la banda terrorista ETA asesinaba en Éibar (Guipúzcoa) al guardia civil JUAN GARCÍA LEÓN, que conducía el primer vehículo de un convoy formado por dos Land Rover y un Seat 131 de la Guardia Civil. El convoy volvía de prestar servicio de vigilancia en la fábrica de armas Star Bonifacio Echeverría de la localidad guipuzcoana. A unos ciento cincuenta metros de la misma, en un punto de la carretera en dirección a Ermua, cinco terroristas les tendieron una emboscada y atacaron el convoy con metralletas, fusiles de asalto y escopetas, además de con dos granadas de mano que no llegaron a explotar. Los asesinos de la banda estaban escondidos en dos sitios distintos: en unas escaleras situadas encima de la estación de servicio de Éibar y debajo de las denominadas Torres de Amaña, por lo que el convoy de la Guardia Civil se vio envuelto en un fuego cruzado.
Los etarras efectuaron más de cien disparos y el primer vehículo, el que conducía Juan García León, recibió el impacto de cuarenta y seis, ocho de los cuales hirieron mortalmente al guardia civil. En el mismo vehículo iba en el asiento del copiloto José Terradillos Piña, y sentado en la parte de atrás Juan Pinilla Méndez. Ambos resultaron ilesos. Gravemente herido, Juan García León fue trasladado en una furgoneta a la casa de socorro de Éibar, donde falleció poco después de llegar.



Juan García León, de 21 años, era natural de Málaga. Ingresó en la Guardia Civil a los 18 años y fue destinado al núcleo de reserva de la 152 Comandancia de Las Palmas, prestando servicio en el aeropuerto. Poco después solicitó voluntariamente el traslado al País Vasco, entre otros motivos para estar más cerca de la familia, ya que su padre, brigada de la Guardia Civil, estaba destinado en el Parque de Automovilismo de Madrid. García León llevaba quince meses destinado en Éibar y, poco antes de ser asesinado por ETA, había solicitado, y obtenido, el traslado a Santa Cruz de Tenerife. Estaba soltero pero se había prometido con una joven de Elgóibar.
El 17 de noviembre de 1982 fallece en Madrid el teniente del Cuerpo de Músicas Militares CÉSAR UCEDA VERA, incapaz de superar las heridas sufridas un mes antes, el 21 de octubre, cuando fue acribillado a balazos en Bilbao por dos terroristas de la banda ETA. Tras ser tiroteado, la víctima fue llevada urgentemente al Hospital de Basurto, pero unos días después lo trasladaron a un hospital de Madrid donde acabaría falleciendo. Su estado fue calificado de «muy grave» desde el primer momento. César presentaba «cuatro orificios de entrada de bala situados uno en la espalda, en la región dorso-lumbar causante de la parálisis apreciada en la pierna izquierda, otros cuatro en el brazo derecho, así como dos balas alojadas en los dos hemitórax».
El 21 de octubre de 1982, a las 7:10 horas, el teniente Uceda salió de su domicilio para dirigirse al trabajo en el acuartelamiento de Munguía. Se subió a su automóvil y lo puso en marcha, justo en el momento en que dos miembros de la banda, que actuaron a cara descubierta, lo tirotearon. El coche, un Volkswagen, avanzó unos metros sin control y se estrelló contra una tintorería situada a unos diez metros del domicilio del militar.



A las 17:00 horas del 17 de noviembre de 1989 Jacques Esnal y Henri Parot asesinaban en Madrid al teniente coronel del Ejército de Tierra JOSÉ MARTÍNEZ MORENO y herían al soldado conductor Alfonso de los Reyes Cobertera Zurita.
El teniente Martínez Moreno se dirigía a su domicilio en el vehículo oficial tras terminar su jornada laboral en el Cuartel General del Ejército. Esnal y Parot pusieron el vehículo en el que viajaban a la altura del coche oficial cuando este se detuvo en un semáforo en rojo en la glorieta de Carlos V, frente a la sede del Ministerio de Agricultura. Uno de ellos se bajó del vehículo y el otro disparó sin bajarse, acribillando a balazos al militar, que falleció en el acto. Los terroristas abandonaron el lugar a toda prisa en dirección a la avenida de la Ciudad de Barcelona.
Alfonso de los Reyes Cobertera, de 20 años, resultó herido en la región cervical, recibiendo el alta médica seis días después. A Alfonso le quedaba apenas una semana para licenciarse.


José Martínez Moreno, de 51 años, estaba soltero. Estaba destinado en el Cuartel General del Ejército de Tierra, en la Inspección de Artillería.
El 17 de noviembre de 2000, el agente de la Policía Nacional Francisco Sanz Morales se encontraba de servicio en la calle Alondra cuando dos miembros de los GRAPO le dispararon por la espalda. El atentado se produjo poco después de una operación que había desarticulado a la cúpula de la organización terrorista.
“Me lo han matado, me lo han matado”, gritaba la madre del policía nacional cuando le dieron la noticia de lo ocurrido. Francisco Sanz Morales tenía 28 años y se había casado hacía apenas un año. Fue enterrado el día 18 de noviembre en la iglesia parroquial de San Ildefonso (La Cistérniga), en Castilla y León.





