
FERNANDO RODRÍGUEZ ESPÍNOLA asesinado el 12 de noviembre de 1979 en Oyarzu.

MIGUEL ZUNZUNEGUI ARRATIBEL, asesinado el 12 de noviembre de 1980 en Ataun.

ANTONIO DE VICENTE COMESAÑA, asesinado el 12 de noviembre de 1983 en Bermeo.
A la una menos cuarto del mediodía del 12 de noviembre de 1979 la banda terrorista ETA asesinaba al guarda forestal FERNANDO RODRÍGUEZ ESPÍNOLA, que fue tiroteado cuando se encontraba en el interior de un bar de la localidad guipuzcoana de Oyarzun (Guipúzcoa). Además de guarda forestal de Icona, Fernando colaboraba como corresponsal en El Diario Vasco y, posteriormente, en La Voz de España.
Dos individuos se situaron en el umbral de la puerta del local, que en esos momentos estaba muy concurrido, y sin mediar palabra le apuntaron a la cabeza y dispararon contra él a muy poca distancia. Fernando fue alcanzado por un disparo en la cabeza y varios más en otras partes del cuerpo, falleciendo prácticamente en el acto.

Fernando Rodríguez Espínola tenía 53 años y estaba soltero. Era natural de Constantina (Sevilla), donde fueron enterrados sus restos mortales. Llevaba veinticuatro años trabajando como guarda forestal, los últimos quince en la zona de Oyarzun.
Un año después, a las 20:00 horas del 12 de noviembre de 1980, la banda terrorista ETA asesinaba en Ataun (Guipúzcoa) a MIGUEL ZUNZUNEGUI ARRATIBEL, camionero de profesión. Una de sus hermanas fue testigo del asesinato. Miguel acababa de regresar de un viaje con su camión y se encontraba en el garaje del caserío familiar, en el barrio de San Gregorio de Ataun, cuando dos individuos encapuchados lo tirotearon a corta distancia, recibiendo un impacto de bala mortal en la cabeza y otros dos en la clavícula.
Según contó su hermana, Miguel tuvo tiempo de interpelar en euskera a los dos etarras, a los que preguntó «¿qué os he hecho yo?» La propia hermana, pese a tener 70 años, intentó arrebatar el arma a uno de ellos, que se la puso en el pecho y le dijo en euskera que no se moviese, mientras el segundo terrorista disparaba sobre la víctima a bocajarro.

Miguel Zunzunegui Arratibel tenía 56 años y estaba soltero. Era camionero, sin militancia política conocida.
A las diez menos cuarto de la noche del 12 de noviembre de 1983 la banda terrorista ETA asesinaba en Bermeo (Vizcaya) al teniente de Navío ANTONIO DE VICENTE COMESAÑA, que trabajaba como ayudante de la Comandancia de Marina de la localidad vizcaína. Antonio se encontraba en una plaza de Bermeo, junto a la estafeta de Correos y cerca de la sede de la Ayudantía de Marina. Era sábado y la plaza se encontraba muy concurrida. El militar iba de paisano de regreso a su domicilio cuando dos individuos le dispararon por la espalda a corta distancia. Antonio se desplomó en el suelo con heridas en el cráneo y el maxilar y falleció durante su traslado en una ambulancia de la Cruz Roja al Hospital de Cruces de Baracaldo. En el lugar de los hechos se recogieron dos casquillos de bala del calibre 9 milímetros parabellum.


Antonio de Vicente Comesaña tenía 52 años y era natural de Pontevedra. Estaba casado y tenía seis hijos, de los que dos estudiaban en Madrid y los otros cuatro estaban en El Ferrol con su esposa, pues Antonio llevaba sólo cuatro meses en Bermeo. A su entierro en El Ferrol asistieron unas tres mil persona




